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La Mirado Del Otro 1998

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Objavio/la rombussquare

Videotranskripcija

No era la primera vez.

Despertarse en cama ajena, en una casa desconocida,

con un cuerpo al lado ajeno y desconocido también,

era una situación que había vivido ya.

Pero la rutina se quebraba en tres puntos.

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No recordaba nada de lo sucedido.

El jovencito con los ojos cerrados me producía una extraña ternura.

Y me entraron ganas de seguir a su lado.

No lo hice.

Un cuerpo incapaz de hacer daño.

Es curioso, según Elio a mí me gustan los viejos.

Algo está cambiando.

No es un planeta remoto, es mi propio cuerpo.

Una zona desconocida para mí, pero profundamente colonizada por mis amantes.

¿Es usted el caballero del champán?

Pasa.

Cierra la puerta.

A nadie le pediría que me ayudara si no fuera a ti, Begoña.

Espero que lo completas.

Ven.

Y se la mete despacio, despacio, despacito.

Y ella grita, "¡Fállame!"

Y yo le digo, "No te cabe, no te cabe."

Y ella grita, "Sí, sí, más, más, más dentro, más."

"Ahora, ahora, ayúdame."

¿Qué quieres, Clara?

Quiero leer, solo eso nada más.

Por favor, hazlo, tía, que solo quiero leer.

Mátame, hijo de puta.

Y lléname de tu leche.

Toma, toda para ti.

Toma, toma, toma.

Todo lo que cabe en mis huevos.

Toma, toma, toma.

Ahora, el flasco, el flasco.

¿Qué flasco?

El que está en la mesilla para guardar lo que salga.

...

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